
Para ello, se recomienda de 20 a 25 gramos de fibra al día para las mujeres y de 30 a 38 gramos para los hombres. Los granos de garbanzo contienen importantes nutrientes que son altamente beneficiosos para nuestro cuerpo y pueden ser incorporados fácilmente en cualquier dieta.
Al igual que otros granos, los garbanzos constituyen una increíble fuente de proteínas y, al combinarse en una dieta con cereales integrales, puede proveer cantidades de proteínas equivalentes a las aportadas por la carne y los productos lácteos. Una taza de estos granos contiene 295 calorías; 4.9g de grasa 49,17g de carbohidratos; 15.65g de proteínas y, además, tiene un bajo Índice Glicémico.
Como la mayoría de los granos leguminosos, el garbanzo es rico en fibra dietaria, lo cual ayuda a prevenir problemas digestivos, disminuye el riesgo de cáncer de colon, controla los níveles de azúcar en la sangre y aumenta la sensación de saciedad por más tiempo después de comer, lo cual puede ayudar a controlar el peso corporal.
Una taza cubre más de la mitad de los requerimientos diarios de fibra, y si se consume regularmente, puede reducir el colesterol malo (LDLc), el colesterol total y los triglicéridos, contribuyendo aún más a disminuir su chance de desarrollar enfermedades cardiovasculares.
Los garbanzos también exhiben propiedades antioxidantes, dado su contenido de manganeso. Este mineral, provee protección contra el daño celular causado por los radicales libres y ayuda a incrementar la producción de energía.
Una taza de este grano aporta al menos de 85% del requerimiento diario de manganeso. Estudios recientes indican que el consumo de garbanzos ayuda a reducir la glucosa en la sangre y a incrementar la sensibilidad de las células a la insulina aunque estos efectos son más evidentes al consumirlos como parte en una sola comida en lugar de ingerir varias pequeñas porciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario