🧠 Arteritis de Células Gigantes: Entender para Acompañar

 Imagina despertar un día con un dolor de cabeza persistente, como si algo presionara desde dentro. Tus ojos se sienten cansados, tu visión se nubla por momentos y, al masticar, te duele la mandíbula. Podrías pensar que es estrés, edad o simplemente una mala racha. Pero a veces, esos pequeños síntomas esconden algo más serio: la Arteritis de Células Gigantes.

¿Qué es esta enfermedad?

La Arteritis de Células Gigantes (ACG) es una inflamación de los vasos sanguíneos, especialmente de las arterias en la cabeza, como la arteria temporal. Afecta principalmente a personas mayores de 50 años y es más común en mujeres.

No es solo un "dolor de cabeza fuerte". Es una afección autoinmune que puede tener consecuencias graves si no se diagnostica a tiempo, como la pérdida de visión.

👁️‍🗨️ “Me dolía la cabeza como nunca antes. Un día, dejé de ver con un ojo. Ahí supe que no era normal.”

– Testimonio de Marta, diagnosticada con ACG a los 67 años.

¿Cómo se siente vivir con ACG?

Vivir con ACG es enfrentarse a la incertidumbre. El diagnóstico suele llegar tras una serie de síntomas que se confunden fácilmente con otras enfermedades:

• Dolores de cabeza persistentes

• Dolor al tocar el cuero cabelludo

• Dolor en la mandíbula al hablar o masticar

• Cambios en la visión

• Fatiga general

• Fiebre de origen desconocido

🩺 El papel del diagnóstico temprano

Un simple análisis de sangre y una biopsia de la arteria temporal pueden marcar la diferencia entre un tratamiento efectivo y una complicación irreversible. La buena noticia es que, con diagnóstico temprano y tratamiento con corticoides, la mayoría de los pacientes mejora significativamente.

❤️ Acompañar es también sanar

Si tienes un ser querido que está pasando por esto, lo mejor que puedes hacer es escuchar, informarte y acompañar. El tratamiento puede durar meses o incluso años, y suele venir con efectos secundarios. La comprensión y el apoyo emocional hacen una gran diferencia.

🧩 En resumen

• La ACG no es común, pero sí peligrosa si se ignora.

• El diagnóstico temprano puede prevenir la ceguera.

• No subestimes el poder de acompañar.