La limpieza del rostro puede facilitarse y ser más efectiva cuando éste se expone al vapor, ya que abre los poros, facilita la salida de espinillas y puntos negros, purifica e hidrata la epidermis, relaja los músculos, estimula la función glandular, favorece la circulación sanguínea y despeja los conductos nasales. Para beneficiarnos con esta técnica podemos recurrir a vaporizadores, los cuales funcionan con electricidad o pilas, o también puedes usar una olla de tamaño mediano, lo que te permite aplicarle al agua algunas hierbas de acuerdo a tu tipo de piel.
¿QUÉ NECESITAMOS?
Ingredientes:
- 1 litro de agua. Si tenemos la piel muy grasa podemos usar agua de mar
- 5 cucharadas de plantas medicinales, según nuestro cutis (50g)
- Una cucharada sopera de vinagre de manzana (10ml)
- Utensilios
- Una cazuela con tapa
- Una toalla
- Algodones para desmaquillar
¿QUÉ PLANTAS ELIJO?
Las plantas medicinales entre los cuales podemos elegir estarán adaptadas a nuestro tipo de cutis y a posibles problemáticas que podamos sufrir:
- Lavanda
- Pétalos de rosa
- Menta
- Corteza de limón
- Manzanilla
- Flores de saúco
- Caléndula
- Eucaliptus
ELABORACIÓN Y APLICACIÓN
- Pondremos a hervir el agua con las plantas medicinales que hayamos elegido
- Cuando llegue a ebullición, apartaremos la cazuela del fuego, la taparemos y la dejaremos reposar 5 minutos.
- Añadiremos la cucharada sopera de vinagre
- A continuación retiraremos la tapa de la olla y, con cuidado de no quemarnos, acercaremos nuestro rostro a los vapores, siempre con los ojos cerrados, hasta el punto de sentir la humedad que se nos acumula en la cara, cómo se calienta y se abren los poros, pero sin sentir que nos quema demasiado.
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