Hablar de sexualidad femenina sigue siendo un tabú en muchos espacios, y cuando el placer no llega, ese silencio puede doler más que la misma frustración. La anorgasmia es una condición que afecta a muchas mujeres —más de las que se atreven a decirlo— y consiste en la dificultad o imposibilidad de alcanzar el orgasmo, incluso con estimulación adecuada.
Pero esto no es una sentencia, ni define el valor de una mujer, ni su capacidad de disfrutar. Es simplemente una señal de que algo necesita ser escuchado, entendido y abordado con cuidado y sin culpa.