¿Alguna vez te has sentido tan cansado que, aunque duermas, nunca parece ser suficiente? ¿O te ha pasado que te miras al espejo y te preguntas por qué tu piel está más seca, tu cabello más delgado, o sientes que has ganado peso sin explicación? No es solo cansancio. Podría ser que tu tiroides esté intentando decirte algo.